Muchos perros muestras un comportamiento nervioso, tiemblan, lloran, se esconden o buscan constantemente la compañía del humano cuando hay una tormenta. la brisa, la lluvia y los relámpagos pueden convertirse en una tortura para el perro.
En primer lugar debemos entender que esos comportamientos tienen como base el miedo, son una respuesta a un estímulo repentino al cual el perro no está acostumbrado y que si no se gestiona de una manera adecuada puede verse reforzado y ser el detonante de una gran cantidad de problemas de comportamiento.
El miedo es una emoción primaria que nos permite reaccionar ante posibles situaciones que atenten contra nuestra integridad, en el caso de una tormenta, los sonidos, los cambios de temperatura y los olores que llegan al perro de manera repentina e intensa pueden sorprenderlo generando una sencibilizacion ante este acontecimiento.
Para ayudar a tu perro en esta situación lo primero que debes hacer es dejar de consentirlo en esos momentos de miedo, ya que estarás reforzandolo. ignóralo! lo mas recomendable es enseñarle algunos de estos estímulos de manera gradual, como es el caso de los sonidos de tormentas que puedes encontrar en youtube (Clic aquí para escuchar sonidos de habituación para la tormenta), colocandolo a un volumen bajo en un día lluvioso, mientras distraes al perro con una actividad repetitiva como el paseo controlado dentro de casa, la practica de los comandos básicos de obediencia o simplemente jugando con la pelota.