El impulso de pastoreo en perros es una conducta instintiva que se presenta en razas de perros pastores, aunque también puede manifestarse en otras razas. Este impulso se activa cuando el perro detecta un objeto o persona que se mueve rápido o de forma errática, y se manifiesta en el intento de agrupar y controlar el movimiento de ese objeto o persona.
El impulso de pastoreo puede ser problemático en el hogar o en otros entornos donde no se necesita controlar el movimiento de los objetos o personas. Por lo tanto, es importante controlar y entrenar a los perros con este impulso para evitar que se convierta en un problema de conducta.
Para controlar el impulso de pastoreo, se pueden utilizar técnicas de entrenamiento y socialización, como la enseñanza de comandos de obediencia, la exposición controlada a estímulos que activan el impulso y el refuerzo positivo. También es importante proporcionar a los perros pastores suficiente ejercicio físico y mental, ya que estos perros tienen una gran energía y necesitan un trabajo que les permita utilizar su instinto natural de pastoreo.