Ir al contenido principal

¿Quieres que tu cachorro haga sus necesidades en el lugar correcto?

Primero hay que aclarar que para enseñarle a tu cachorro buenos hábitos higiénicos debes tener una buena planificación adaptada a la etapa de desarrollo en la que esta, constancia, disciplina y mucha, pero ¡MUCHA! Paciencia.

Desde que el cachorro nace, la madre se encarga de mantener el cubil aseado, ella lame muy a menudo a los cachorros para mantenerlos limpios y para estimularlos. Esto hace que los cachorro crezcan en un ambiente limpio y aprenda el habito de la higiene.

Mientras el cachorro va creciendo aumenta su movilidad y su interés por conocer el entorno que le rodea, eso hace que siga  a su madre fuera del canil y al estimularse por el esfuerzo orina o defeca por primera vez en un lugar adecuado, es decir lejos del cubil.
A medida que pasa el tiempo el cachorro comprende que el cubil es un lugar limpio donde pasa la mayor parte del tiempo y que debe buscar un lugar alejado de el para hacer sus necesidades.

Pero cuando levamos este cachorro a nuestra casa y lo separamos de su camada todo cambia, es un lugar nuevo y no tiene ninguna referencia que le diga donde debe orinar o defecar.


Es por eso que nos corresponde imitar de alguna forma el proceso que siguió en compañía de su madre.

Paso 1
Establece un lugar donde tu cachorro puede hacer sus necesidades 


(si el perro ya ha orinado coloca un papel para que absorba y luego coloca el papel en el lugar establecido, así tendrá una referencia olfativa)

Paso 2
Justo al lado coloca su cama con sus juguetes y su agua ( también debes colocar su comida en ese lugar cuando le toca)


Este espacio debería estar confinado para que el cachorro solo tenga acceso a ese cuadro
Los cachorros en sus primeras etapas orinan y defecan muy a menudo. Principalmente después de comer y beber, en momentos de emoción, cuando juegan, después de despertar (de cualquier sueño)

Así que de ti depende el éxito de este proceso por que debes colocarlo en el lugar de confinamiento en el momento preciso, tomando en cuenta los momentos donde el cachorro tiene mas posibilidades de hacer sus necesidades.

Paso 3
Cada vez que el cachorro haga sus necesidades en el lugar indicado debes premiarlo y hacer mucho cariño, pero si fallas y el cachorro orina o defeca fuera del lugar de confinamiento ignóralo y limpia el lugar con un eliminador de rastro que te enseñe en el artículo anterior.

Los perros y en especial los cachorros buscan constantemente la atención del humano, así que tendera a repetir el comportamiento que hace que le prestes atención y disminuir el que hace que lo ignores.





Entradas populares de este blog

El Rol del Paseador Canino en eacanina

Ser paseador de perros puede parecer sencillo desde fuera: se trata de llevar al animal de un punto a otro y devolverlo sano y salvo. Pero en eacanina, esta labor toma una dimensión mucho más profunda. Aquí entendemos el paseo como una práctica que combina bienestar físico, emocional y relacional, tanto para el perro como para el humano. Quien se une a nuestro equipo no solo camina con perros: se convierte en una figura de confianza, en un observador atento y en un canal de equilibrio para el animal y su tutor. Para formar parte de eacanina hay que entender que el paseo es una extensión del cuidado consciente. Buscamos personas puntuales, responsables, que disfruten de la compañía de los perros y que tengan una actitud abierta al aprendizaje constante. El paseador ideal no solo interpreta señales corporales, sino que sabe comunicarse con respeto, tanto con el animal como con los humanos involucrados. La empatía no es un detalle: es el centro de todo. Además de la actitud, el manejo téc...

Las Cuatro Fases del Paseo Canino – Mucho Más Que Caminar

En escanina, no concebimos el paseo como una actividad mecánica ni como un simple recurso para “gastar energía”. Lo vemos como un proceso integral que puede mejorar la vida del perro si está bien estructurado. Para que el paseo tenga sentido terapéutico, emocional y físico, debe pasar por cuatro fases clave: ejercicio físico, estimulación mental, entretenimiento y calma. La proporción de cada fase varía según el perro, su personalidad y sus necesidades puntuales. Lo primero que hay que entender es que el paseo comienza antes de salir. Desde el momento en que recibes al perro, ya estás influyendo en su estado emocional. Tu actitud, tu energía, tu forma de saludarlo y de colocarle el arnés son parte de esa primera impresión que marca el ritmo del paseo. Si lo haces con calma, firmeza y alegría, ya estás sembrando la base correcta. La fase física es la más reconocida: caminar, trotar, jugar con intensidad moderada. Pero no se trata solo de movimiento. Se trata de canalizar la energía que ...

Tipos de Perros y Cómo Trabajar con Ellos Durante el Paseo

No hay dos perros iguales. Incluso cuando comparten raza o edad, cada uno es un universo con historia, temperamento y vínculos que moldean su forma de caminar, reaccionar y comunicarse. Por eso, el paseador de escanina debe desarrollar una mirada sensible y práctica, capaz de identificar qué tipo de perro tiene frente a sí, cómo relacionarse con él y cómo adaptar el paseo a sus necesidades. Hay perros tranquilos, que caminan con paso firme y mirada serena. Su ritmo suele ser pausado, y disfrutan del silencio y de la rutina. Con ellos, el paseo puede ser una oportunidad para reforzar el vínculo, mantener la calma y aprovechar momentos de contemplación. Es importante no apurarlos ni llenarlos de estímulos innecesarios. Estos perros valoran la previsibilidad y el respeto por sus tiempos. También están los perros juguetones, entusiastas, que parecen sonreír con cada paso. Su energía es contagiosa y necesitan momentos de movimiento, interacción y exploración. Pero el exceso puede llevarlos ...